El equipo de la Escuela Taller en Alemania bajo las temperaturas gélidas desarrolla su trabajo y actividades con mucha ilusión. Los comentarios en el blog, por teléfono y en los correos ponen de manifiesto que a pesar de las bajas temperaturas, rondando los doce bajo ceros, los ánimos están muy altos. El trabajo se está desarrollando con satisfacción y por tanto los objetivos se están cumpliendo.
Es motivo de satisfacción saber que el personal que está representando la Escuela Taller en aquella zona de la geografia alemana está demostrando que se puede hacer Europa, se pueden hacer intercambios entre jóvenes y adultos, a pesar de las bajas temperaturas, en condiciones climáticas distintas a las nuestras, en la comunidad Valenciana. El trabajo se está cumpliendo con creces. El alojamiento y la comida ha tenido una buena acojida por parte de todos y la organización continua trabajndo para que todo salga bien.
Como decía uno de los monitores de la Escuela Taller en el intercambio, es una pena que la continuidad de estos porgramas se vea mermada por el propio desarrollo del Programa y se pierda la continuidad, pues tiene inicio y final. Como decía el monitor, "la no continuidad me genera un cargo de conciencia ya que me gustaría compartir en España con los alemnaes el trato aqui recibido". Totalmente de acuerdo con ese planteamiento.